El Eneatipo Cinco siente una necesidad de examinar por sí mismo la realidad y la verdad de los hechos desde la mente racional, donde obtienen la fuerza y la seguridad que necesitan. Pueden ser apasionados técnicos de la realidad y todo lo que concierne a ella. Buscan encontrar la seguridad de la misma a través del razonamiento. Les apasiona el orden mental con el que escudriñan la realidad y el comportamiento de otros. Son personas difíciles de manipular y convencer, pues se atañen a una serie de normas racionales inquebrantables, manifestando siempre una gran intensidad intelectual en su comportamiento. Suelen dedicar su atención a temas que les permitan un desarrollo intelectual de sí mismos y de la comprensión de la realidad, pudiendo ser investigadores de la cultura, el arte, el cine o la literatura. Pasan mucho tiempo de su vida coleccionando ideas para sentirse más seguros y preparados para la vida real. El problema de este análisis concienzudo de la realidad es el rechazo que sienten por la emoción positiva del amor. Esto los lleva a no querer desarrollar las relaciones personales con los demás, pues estas son un enjambre de inestabilidad que los perturba gravemente. Por ello, necesitan refugiarse para reafirmarse en su propia integridad, alejándose de aquello que los desestabiliza. Su retiro social los puede llevar a ser ascéticos, ermitaños y solitarios, todo para enfocarse en su pasión de escudriñar la realidad sin emociones positivas que los perturben. En la infancia, han podido sentirse niños desconectados del amor, viviendo en un mundo frío que los ha llevado a aislarse para sobrevivir, creando una densa coraza para no compartirse con los demás.